Cita de javand2030@hotmail.com en agosto 7, 2020, 7:15 am

Hola, tengo 41 años, llevo practicando fap desde los 14 años.

Mi situación tiene un agravante adicional, soy gay, también somos muy propensos al fap, vivimos pensando en el sexo todo el día.

Desde pequeño me sentí solo por ser gay, no pude charlar con mi familia y sin embargo me gustaban los chicos, en el afán de sentir placer, me topé con la masturbación sin saberlo, simplemente la descubrí una tarde cuando pensaba en el chico que me gustaba.

No podía expresar lo que sentía, no podía conseguir lo que buscaba, tampoco lo intentaba, yo mismo me discriminaba, y caí fácilmente en la trampa, la masturbación se volvió en la respuesta para todo.

Después de terminar la U, ya había sumado la pornografía a la masturbación. Cuando ya estaba trabajando, a los 26 años, sentí la necesidad de acercarme a un chico, de buscar el contacto físico.

Cuando conseguí mi primer chico para tener sexo, no pude disfrutarlo plenamente. Y no lo entendía, pensaba que era normal, era la primera vez, y seguía masturbándome…

Con el tiempo, a pesar de que conocía más chicos y me gustaban, si conseguía tener sexo, la historia se repetía, no podía disfrutarlo. Con el tiempo comprendí que era el fap el problema.

Pero para ese entonces, el fap ya había ocupado un lugar muy importante en mi vida y ahora no solo justificaba mi soledad, sino también el estrés y la ansiedad de mi trabajo.

 

El mundo gay es muy difícil, sólo dos variables lo dominan: el dinero (porque puedes tener al chico que quieras) y la belleza (porque puedes estar con quien quieras), yo no tengo ni lo uno ni lo otro. Además nos persigue el VIH y otras tantas enfermedades. 

En medio de esa situación más compleja me aferré más al fap, ahora presento problemas de salud, hormonales, digestivos y de circulación, agotamiento, cansancio, temor a enfrentar mis problemas en el trabajo.

Ahora, me he reducido a pagar a chicos sólo por compañía, porque nunca he sido agradable físicamente y con el PMO ni siquiera puedo funcionar sexualmente.

Buscando auxilio, encontré el reto de 21 días de Pablo Zamit, muchas gracias.

Un rayo de esperanza en mi vida, tengo que cambiar muchos hábitos, mi camino es muy largo, pero quiero cambiar. Yo creo que ya no puedo tener una relación sentimental, tal vez no disfrutaré del sexo jamás (es el pago de la deuda por tantos años con el fap), pero tengo que intentar mejorar mi calidad de vida.